sábado, 28 de enero de 2012

Palabras que te dejan sin palabras.

Él y ella. Un "nosotros". Un beso, después otro y otro más. Cruzan una mirada. Una sonrisa ilumina inevitablemente el rostro de cada uno de ellos. Él, mirándola fijamente a los ojos le dice:
-Te quiero. Te quiero. Te quiero. Te quiero. 
Ella, no puede parar de sonreír. Es feliz. Nunca ha sido tan feliz. Él la hace feliz. Él repite:
-Te quiero.. comer!
Ella, ahora entre risas, típicas risas de enamorados, dice:
-Qué no quieres hacerme tú a mi? 
Él, primero ríe, le ha hecho gracia la pregunta, pero luego, durante un segundo se queda pensativo hasta que le responde: 
-Perderte. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario